El par NZD/USD extendió su declive el martes, cayendo un 0.27% para negociar cerca de 0.5725 durante la sesión asiática. El dólar neozelandés (NZD) sigue estando bajo presión frente a las principales divisas, debido a las crecientes expectativas de que el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda (RBNZ) podría aliviar aún más la política monetaria para contrarrestar la desaceleración de la inflación.
Los datos publicados el lunes por Stats New Zealand mostraron que el Índice de Precios al Consumidor (CPI) general aumentó un 3.0% interanual en el tercer trimestre, en línea con las expectativas y por encima del 2.7% anterior.
Sin embargo, gran parte de este aumento fue impulsado por factores puntuales y estacionales, incluido un aumento del 8.8% en los impuestos sobre la tierra a nivel local, según Bloomberg. Mientras tanto, la tendencia subyacente de la inflación continuó enfriándose, lo que refuerza las especulaciones de que el RBNZ podría relajar su política en las próximas reuniones.
La fortaleza del dólar estadounidense aumenta la presión sobre el kiwi
El dólar neozelandés también enfrenta vientos en contra debido a un dólar estadounidense (USD) más fuerte en general, respaldado por la disminución de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y el creciente optimismo de que el gobierno federal de EE. UU. se reabrirá pronto después de un cierre de tres semanas.
El dólar verde ha limitado los intentos de recuperación del NZD/USD, manteniendo el par cerca de los mínimos de varios meses.
Los participantes del mercado ahora centran su atención en el informe retrasado del Índice de Precios al Consumidor de EE. UU. (CPI) de septiembre, que se publicará el viernes. Se espera que los datos guíen las perspectivas de política a corto plazo de la Reserva Federal (Fed), lo que podría influir en la demanda del USD y, por extensión, en el par NZD/USD.
Perspectiva técnica: el sesgo bajista se mantiene
El par NZD/USD continúa cotizando cerca de su mínimo de seis meses alrededor de 0.5740, manteniendo una estructura firmemente bajista. Todas las medias móviles exponenciales (EMAs), desde el corto hasta el largo plazo, tienen una pendiente descendente, confirmando el impulso negativo persistente.
El Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días sigue por debajo de 40.00, lo que señala una fuerte presión de venta. Una ruptura sostenida por debajo del mínimo del 14 de octubre de 0.5682 podría abrir la puerta a un declive más profundo hacia el mínimo del 10 de abril de 0.5628 y el soporte psicológico en 0.5600.
Por el contrario, una recuperación por encima del nivel psicológico de 0.6000 podría desencadenar un rebote hacia el máximo del 19 de junio de 0.6040 y el mínimo del 11 de septiembre de 0.6100, aunque tal movimiento requeriría un cambio significativo en el sentimiento del mercado.
