El oro (XAU/USD) extendió su carrera récord el jueves, superando los $4,250 por onza por primera vez, ya que los inversores acudieron a activos refugio en medio de renovadas tensiones comerciales entre EE. UU. y China y expectativas de mayor flexibilización monetaria por parte de la Reserva Federal (Fed). Al momento de escribir, XAU/USD cotiza cerca de $4,253 — un aumento de casi 10% este mes y más del 60% en lo que va del año.
El rally explosivo del metal refleja la creciente preocupación de los inversores sobre las perspectivas económicas globales a medida que se intensifican los riesgos geopolíticos y fiscales.
La escalada de la guerra comercial alimenta los flujos hacia refugios seguros
El sentimiento de riesgo se deterioró bruscamente tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump de imponer aranceles del 100% a todas las importaciones chinas a partir del 1 de noviembre, reavivando los temores de una guerra comercial total. La medida fue en respuesta a los controles de exportación más estrictos de Pekín sobre elementos de tierras raras, un componente crítico en la fabricación tecnológica, aumentando las preocupaciones sobre interrupciones en la cadena de suministro y un crecimiento global más lento.
Trump describió la situación como “una guerra comercial total” el miércoles, enfatizando que “si no tuviéramos aranceles, estaríamos expuestos como si no fuéramos nada”. A pesar de la retórica dura, el secretario del Tesoro Scott Bessent trató de calmar los mercados, confirmando que la reunión prevista entre Trump y el presidente chino Xi Jinping más adelante este mes en Corea del Sur sigue en pie. Añadió que Washington podría considerar retrasar la implementación de aranceles si Pekín modera sus restricciones a la exportación.
Estancamiento del gobierno y apuestas sobre la política de la Fed aumentan la presión
El prolongado cierre del gobierno estadounidense, que entra en su tercera semana, sigue pesando sobre el sentimiento del mercado. El Senado falló por novena vez el miércoles en aprobar un proyecto de financiamiento respaldado por el GOP, mientras que la Casa Blanca advirtió que los despidos federales podrían superar los 10,000 empleados si el estancamiento continúa. El Tesoro estima que el cierre le cuesta a la economía estadounidense hasta $15 mil millones por semana.
Al mismo tiempo, el dólar estadounidense y los rendimientos del Tesoro permanecen bajo presión, ya que los inversores esperan cada vez más que la Fed adopte una postura más acomodaticia. La herramienta CME FedWatch muestra un 96,7% de probabilidad de un recorte de 25 puntos básicos en la reunión del FOMC del 29–30 de octubre y un 93,7% de probabilidad de otro recorte en diciembre.
El gobernador de la Fed, Stephen Miran, dijo el jueves que, si bien los aranceles podrían eventualmente añadir presión inflacionaria, aún no ve signos concretos de ello. Mantuvo su proyección de crecimiento alrededor del 2% para 2025, señalando que las perspectivas de 2026 dependen en gran medida de cómo evolucionen las tensiones entre EE. UU. y China.
Los analistas se vuelven más optimistas con el oro
Los principales bancos están aumentando sus objetivos de precios a largo plazo para el oro en medio de la creciente incertidumbre y expectativas continuas de flexibilización de políticas.
- Bank of America ahora pronostica que el oro alcanzará $5,000 por onza para 2026.
- Goldman Sachs espera $4,900 para finales de 2026.
- ANZ Bank proyecta $4,400 a fines de 2025, con un pico potencial cerca de $4,600 a mediados de 2026.
Perspectiva técnica: el impulso sigue fuerte a pesar de señales de sobrecompra
Desde el punto de vista técnico, la tendencia alcista del oro sigue intacta, respaldada por un fuerte impulso y compras consistentes en las caídas. XAU/USD continúa cotizando muy por encima de sus medias móviles a corto y largo plazo, reflejando un control alcista sostenido.
El soporte inmediato se encuentra alrededor de $4,200, seguido de la zona $4,150–$4,160, área que coincide con la SMA de 21 períodos en el gráfico de 4 horas. Las correcciones más profundas hacia la 50-SMA cerca de $4,065 parecen poco probables a corto plazo, dado el fuerte sesgo alcista del mercado.
El índice de fuerza relativa (RSI) se mantiene elevado cerca de 77, lo que sugiere condiciones de sobrecompra. Sin embargo, a pesar de una leve divergencia entre precio e impulso, se espera que cualquier corrección sea limitada mientras la narrativa macroeconómica más amplia favorezca la aversión al riesgo y la flexibilización de políticas.