Estados Unidos y China buscan finalizar un acuerdo sobre tierras raras en negociaciones en Londres, aliviando restricciones de exportación que afectan cadenas globales de suministro y sectores industriales.
Estados Unidos y China avanzan hacia la finalización de un acuerdo sobre tierras raras en negociaciones en Londres
En un paso crucial para aliviar las crecientes tensiones comerciales, Estados Unidos y China trabajan para concretar el acuerdo sobre tierras raras, inicialmente alcanzado por los presidentes Donald Trump y Xi Jinping. Se espera que este acuerdo, destinado a resolver interrupciones significativas en las cadenas globales de suministro, sea firmado durante negociaciones de alto nivel en Londres, según declaró Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional en la Casa Blanca.
El lunes, los principales negociadores comerciales de Estados Unidos — el Secretario del Tesoro Scott Bessent, el Secretario de Comercio Howard Lutnick y el Representante Comercial de EE.UU. Jamieson Greer — se reunieron con sus homólogos chinos en Londres para lograr un consenso sobre los controles de exportación de tierras raras. Hassett calificó estas negociaciones como un paso clave para asegurar la seriedad de China y lograr un “apretón de manos” simbólico que abriría la vía para resolver disputas comerciales más amplias.
“El propósito de la reunión hoy es asegurarnos de su seriedad y literalmente obtener un apretón de manos”, dijo Hassett en una entrevista con CNBC. “Espero que sea una reunión corta con un apretón de manos fuerte y firme.”
La importancia de las tierras raras en el comercio mundial
Los elementos de tierras raras, esenciales para la fabricación de una amplia gama de productos tecnológicos avanzados — desde vehículos eléctricos hasta teléfonos inteligentes y equipos de defensa — han estado en el centro de recientes disputas comerciales. China controla la mayor parte del suministro mundial de tierras raras y de imanes, lo que le otorga una influencia significativa en las cadenas globales de suministro.
Las recientes restricciones chinas a la exportación de tierras raras hacia Estados Unidos amenazan con interrumpir las líneas de producción de empresas estadounidenses que dependen en gran medida de estos materiales. Estas restricciones han aumentado las preocupaciones sobre la seguridad de las cadenas de suministro y han exacerbado las disputas comerciales entre las dos superpotencias económicas.
Hassett destacó la importancia de estas restricciones, afirmando: “Las restricciones chinas a la exportación de tierras raras fueron un punto de gran dificultad.”
Alivio de los controles de exportación y futuras negociaciones
La delegación estadounidense espera que las negociaciones en Londres no solo confirmen el compromiso de China con el acuerdo sobre tierras raras, sino que también conduzcan a un alivio rápido de las restricciones de exportación estadounidenses sobre semiconductores y otras tecnologías críticas. Hassett se mostró optimista de que, tras el apretón de manos, las restricciones de ambos lados se aliviarán y las negociaciones podrán volver a asuntos menos espinosos.
“Esperamos que inmediatamente después del apretón de manos, los controles de exportación estadounidenses se alivien y las tierras raras se liberen en volumen,” dijo Hassett.
Resolver las cuestiones relacionadas con los controles de exportación de tierras raras se considera un paso clave para estabilizar las relaciones comerciales más amplias entre Estados Unidos y China, que enfrentan tensiones por tarifas, restricciones tecnológicas y factores geopolíticos. Ambas partes reconocen la importancia de mantener canales abiertos para recursos vitales que sustentan industrias clave.
Impactos más amplios en las cadenas globales de suministro
La disputa sobre las tierras raras subraya la fragilidad de las cadenas globales de suministro y la importancia estratégica de estos materiales en la producción moderna. Los vehículos eléctricos, tecnologías de energía renovable, componentes aeroespaciales y sistemas de defensa dependen todos de un suministro estable de tierras raras.
El dominio de China en el mercado de tierras raras ha impulsado a Estados Unidos y otros países a buscar fuentes alternativas y a desarrollar capacidades productivas internas. Sin embargo, hasta que estos esfuerzos maduren, la cooperación entre Estados Unidos y China sigue siendo clave para garantizar la estabilidad del suministro.
Una vez finalizado, este acuerdo podría servir como modelo para resolver otras disputas comerciales y ayudar a prevenir interrupciones que podrían afectar a las industrias en todo el mundo.
Perspectivas a futuro
Las negociaciones en Londres marcan un momento crucial en las continuas conversaciones comerciales entre Estados Unidos y China. Aunque aún quedan muchos asuntos por resolver, la disposición a llegar a un apretón de manos simbólico indica la voluntad de ambas partes de colaborar en temas clave.
La economía mundial observa de cerca estos acontecimientos, y sus resultados tendrán un impacto significativo no solo en Estados Unidos y China, sino también en los mercados internacionales que dependen de estos recursos vitales.
