El Promedio Industrial Dow Jones (DJIA) repuntó el viernes, reduciendo las pérdidas de mitad de semana, mientras los inversores confiaban en la posibilidad de un nuevo recorte de tasas por parte de la Reserva Federal (Fed) en octubre. El índice de precios de gastos de consumo personal (PCE) de EE. UU. se alineó con las previsiones, manteniendo intactas las expectativas del mercado sobre un posible alivio de la política monetaria.
Inflación estable, apuestas por recortes de tasas siguen altas
La inflación subyacente del PCE se mantuvo en 2,9 % interanual en agosto, cumpliendo con las previsiones, con el dato mensual sin cambios en 0,2 %. El PCE general se aceleró a 0,3 % mensual y 2,7 % interanual. A pesar de la estabilidad de la inflación, la lectura no fue lo suficientemente fuerte como para reavivar las preocupaciones restrictivas de la Fed.
Los mercados continúan favoreciendo un mayor alivio. Según la herramienta CME FedWatch, los operadores descuentan casi un 90 % de probabilidad de un recorte de 25 puntos básicos en la reunión del 25 de octubre, tras la reducción de un cuarto de punto en septiembre. Los ingresos y gastos personales aumentaron un 0,4 % y 0,6 % respectivamente, destacando la demanda sólida de los hogares, aunque la creciente presión salarial podría complicar la trayectoria de la política de la Fed si la inflación se mantiene persistente.
El sentimiento del consumidor disminuye, expectativas de inflación permanecen elevadas
La encuesta de la Universidad de Michigan de septiembre mostró una ligera caída en el sentimiento y las expectativas de los consumidores respecto al mes anterior. Las expectativas de inflación bajaron ligeramente pero siguen altas, con una proyección a un año del 4,7 % y a cinco años del 3,7 %.
Las expectativas de inflación persistentemente altas corren el riesgo de consolidarse, ya que los hogares podrían seguir anticipando un crecimiento de precios por encima de la tendencia. Esto podría reforzar el comportamiento de fijación de precios de las empresas, limitando potencialmente la capacidad de la Fed para implementar recortes de tasas más profundos.
