El dólar canadiense (CAD) se mantuvo bajo presión frente al dólar estadounidense (USD) el lunes, con el par USD/CAD cotizando cerca de 1,3808 al momento de escribir. El par avanzó incluso cuando el dólar estadounidense caía frente a la mayoría de las principales monedas, mientras los mercados continúan asimilando los recortes de tasas de la semana pasada por parte de la Reserva Federal (Fed) y el Banco de Canadá (BoC).
Los precios del crudo extendieron su caída a comienzos de semana, con el West Texas Intermediate (WTI) deslizándose hacia los 61,50 dólares por barril. Como exportador clave de energía, la moneda canadiense es particularmente sensible a los movimientos de los precios del petróleo, y la caída de los precios suele pesar sobre el loonie.
El BoC continúa flexibilizando ante condiciones debilitadas
El BoC redujo su tasa nocturna en 25 puntos básicos hasta el 2,50 % la semana pasada, marcando su octavo recorte desde que la tasa de política alcanzó un máximo de 5,25 % en septiembre de 2023. La decisión subraya la profundidad del ciclo de flexibilización del Banco en respuesta al crecimiento lento y al enfriamiento de la inflación.
Según el Comunicado de Política Monetaria del Banco, tres desarrollos han cambiado la perspectiva de riesgos desde julio: un mercado laboral más débil, una presión inflacionaria subyacente disminuida y la eliminación de la mayoría de los aranceles de represalia, lo que redujo los riesgos alcistas de inflación.
El gobernador Tiff Macklem afirmó que el Banco está listo para recortar más «si los riesgos aumentan». Los analistas de los principales bancos canadienses, incluidos TD y CIBC, pronostican al menos una reducción más antes de fin de año. Los swaps de índices nocturnos sugieren aproximadamente un 40 % de probabilidad de otro recorte en octubre y alrededor del 75 % de probabilidad para diciembre, según Reuters.
La Fed mantiene la cautela pese al recorte
La Fed también recortó las tasas en 25 puntos básicos la semana pasada, pero el presidente Jerome Powell mantuvo una postura cautelosa, destacando que los futuros movimientos de política dependerán de los datos entrantes. El gráfico actualizado de puntos (dot plot) indicó la probabilidad de dos reducciones adicionales para fin de año, en línea con las expectativas de un enfoque gradual.
Hablando con el Wall Street Journal el lunes, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, minimizó la necesidad de recortes adicionales a corto plazo, señalando que anticipa solo una reducción en 2025. Describió el entorno de política como uno de los más desafiantes en los últimos años, con riesgos en ambos sentidos: la inflación podría resurgir si el alivio es excesivo, mientras que la debilidad del mercado laboral representa riesgos a la baja para el crecimiento. Bostic también enfatizó que no considera que el mercado laboral esté en crisis.
