Los mercados asiáticos cerraron a la baja el miércoles, siguiendo las pérdidas del sector tecnológico en Wall Street, mientras los inversionistas asimilaban los débiles datos comerciales de Japón y la última decisión de política monetaria de China.
Las exportaciones de Japón cayeron un 2,6% interanual en julio, su mayor descenso en más de cuatro años, superando la contracción prevista del 2,1%. El índice Nikkei 225 retrocedió un 0,93%, mientras que el Topix bajó un 0,31%. Las acciones del grupo SoftBank se desplomaron más de un 9% tras el anuncio de una inversión de 2.000 millones de dólares en Intel, lo que desencadenó ventas masivas, a pesar de que las acciones de Intel en EE. UU. subieron casi un 7% en la sesión anterior.
En otros mercados de la región, el Kospi de Corea del Sur cayó un 1,52% y el Kosdaq un 1,77%. En Australia, el S&P/ASX 200 perdió un 0,24%. En la Gran China, el índice Hang Seng de Hong Kong retrocedió un 0,71% y el CSI 300 del continente cayó un 0,48% después de que el Banco Popular de China mantuviera sin cambios sus tasas de referencia por tercer mes consecutivo. En Taiwán, el índice Taiex tuvo el peor desempeño con pérdidas superiores al 2%.
Un punto positivo provino del fabricante chino de juguetes Pop Mart, cuyas acciones subieron más de un 8% tras anunciar un aumento cercano al 400% en su beneficio neto, impulsado por la fuerte demanda global de sus muñecos Labubu. El valor abrió a la baja, pero luego revirtió con fuerza al alza.
En Wall Street, el S&P 500 cerró con una caída del 0,59% en 6.411,37 puntos, presionado por las pérdidas de Nvidia y otras tecnológicas. El Nasdaq Composite cedió un 1,46% hasta los 21.314,95 puntos, mientras que el Dow Jones Industrial Average terminó prácticamente plano, con un leve alza del 0,02%, tras alcanzar un máximo histórico intradía.