La persistente incertidumbre económica frena la recuperación del mercado estadounidense de transporte por carretera, generando un desequilibrio entre oferta y demanda.
A pesar de señales de recuperación, el mercado de transporte por carretera en Estados Unidos enfrenta importantes desafíos económicos. Las fluctuaciones en la demanda, la capacidad excedente y la inestabilidad en los flujos de importación postergan el esperado repunte.
La incertidumbre económica frena la corrección del mercado
El sector del transporte por carretera en Estados Unidos, un indicador clave de la salud económica nacional, atraviesa uno de los períodos más largos y difíciles desde la desregulación. Aunque se observan indicios iniciales de recuperación, la incertidumbre económica persistente ralentiza este proceso y aplaza la salida del mercado de esta prolongada fase de tensión.
El análisis de las tendencias del Índice de rechazos de licitaciones (OTRI) y del Índice Nacional de Transporte por Carretera (NTIL) durante los últimos dos años muestra una trayectoria ascendente con volatilidad creciente. Sin embargo, durante los primeros cinco meses de 2025 esta tendencia se aplanó, reflejando una desaceleración en la recuperación.
Demanda baja, capacidad alta
La demanda de transporte por carretera ha disminuido aproximadamente un 30 % respecto a los picos alcanzados durante la pandemia de COVID-19. Estos niveles récord no eran sostenibles, pero se mantuvieron lo suficiente como para inflar la capacidad mucho más allá de las necesidades reales.
Entre junio de 2020 y octubre de 2022, el número de licencias operativas activas para transporte por carretera aumentó alrededor del 48 %. Desde entonces, ha disminuido solo un 12 %, lo que indica una corrección lenta de la capacidad. El retraso en los datos de la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes (FMCSA) agrava esta situación, pues puede tardar hasta dos años eliminar las licencias inactivas, salvo que los operadores reporten su salida voluntariamente. Fuentes como Carrier Details acortan este plazo a cerca de un año, pero sigue siendo insuficiente para un monitoreo en tiempo real.
Además, una licencia puede representar desde un solo camión hasta una flota de mil vehículos, lo que implica una distribución desigual de este indicador.
Los rechazos de licitaciones reflejan el equilibrio del mercado
En las condiciones actuales, la tasa de rechazo de licitaciones es un indicador confiable del equilibrio del mercado. Los transportistas tienden a rechazar cargas solo cuando disponen de alternativas más rentables, por lo que el aumento en la tasa de rechazo indica una capacidad ajustada y redes tensionadas.
Tras varios años de corrección, el mercado parecía acercarse al equilibrio a finales de 2024. Durante las festividades, el índice OTRI superó el 10 % por primera vez desde 2021, pese a un aumento en el uso del transporte intermodal para trayectos largos. Esta tendencia fue posible gracias a los adelantos en la formación de inventarios, que otorgaron mayor flexibilidad en la planificación del transporte.
El efecto de la guerra comercial
Otro factor que añade volatilidad es la guerra comercial en curso. Tras una desaceleración temporal a finales de abril y comienzos de mayo, la actividad tarifaria se reanudó, enviando señales contradictorias y provocando cambios repetidos en el comportamiento logístico.
Los datos de reservas de importación muestran un aumento abrupto en los volúmenes de contenedores dirigidos a Estados Unidos el verano pasado, seguido de fluctuaciones significativas. Aunque los volúmenes de importación en contenedores suelen ser un buen proxy de la demanda, pueden dar señales erróneas en períodos de incertidumbre, fenómeno persistente desde la pandemia.
Mercancías almacenadas por incertidumbre en la demanda
Aunque la demanda de importación se mantiene relativamente alta, gran parte de la mercancía permanece almacenada en bodegas en lugar de circular por las carreteras. Esta cautela se debe a la incertidumbre sobre políticas comerciales, gasto del consumidor y gestión de inventarios.
Como resultado, las mercancías que podrían impulsar el mercado del transporte por carretera permanecen inactivas, lo que continúa presionando la demanda en el sector.
Conclusión
Aunque la estructura del mercado de transporte por carretera en Estados Unidos está lista para la recuperación, la inestabilidad macroeconómica y la falta de claridad en las políticas comerciales retrasan este proceso. Mientras no haya señales claras sobre la demanda y la regulación, el sector seguirá recuperándose de forma lenta y con fluctuaciones.
